
Revista DM2
Septiembre 2017
¿QUÉ SE SIENTE
SER AUTISTA?
Esto es algo que muchos
me han preguntado, y
aunque parece fácil responder,
para las personas que tenemos autismo no lo
es del todo.
No hay una respuesta sencilla
Por Diego Y. Moreno Ramirez
Lo que podemos sentir es tan diverso y tan desconcertante que muchas veces no tenemos palabras para describirlo. Para llegar a saberlo primero tenemos que dar nombres y palabras a todos esos sentimientos y emociones que surgen de nuestro interior, en el hacer esto exactamente es donde radica una de las principales dificultades del autismo; así que en mi caso y en el de otros que conozco, han sido los libros, testimonios de otras personas, recuerdos, de donde he sacado las palabras e imágenes adecuadas para poder representar lo que sentimos y así poder expresarlo.
Como verán, decir qué sentimos no se nos da de forma natural, incluso no saber expresarnos causa en nosotros sentimientos de ansiedad, que al no poderlos expresar desbordan nuestras emociones causándonos esas rabietas que algunos dicen hacemos porque somos groseros o mal educados.
ANSIEDAD y MIEDO aparecían una y otra vez en aquellos momentos donde estaba perdido, porque me daban muchas instrucciones que no lograba procesar, en aquellos momentos donde el entorno me saturaba… solo sabía que estaba cansado cuando los demás no lo estaban y se suponía que debía pasarlo muy bien. Otras veces aparece la palabra IRA anticipándome para luchar contra mi entorno, tratar de poner las cosas en su sitio después de sentir FRUSTRACIÓN sí las cosas no me salían como yo quería o de repente las personas no lograban entenderme.
Todo esto hace que en ocasiones para mí el mundo fuese un lugar hostil del cual deseaba desconectarme y no saber de él, esto hace que se piense no deseamos hablar con otros ni socializar. Nada más lejos de la verdad. Tampoco significa que no seamos FELICES, simplemente disfrutamos a nuestra manera y la forma como percibimos el mundo hace que disfrutemos de pequeños detalles que para el resto de mortales son insignificantes, pero nos permiten entender y sobrellevar esta confusa sociedad. De igual forma percibimos la realidad de forma fragmentada y descifrar todo lo que sentimos, entender cómo piensan los demás, es para nosotros igual que armar un rompecabezas de mil piezas, que podemos tomar muchos años en armar y para ello necesitaremos ayuda.
Esto es una pequeña muestra de cómo se siente tener autismo desde mi punto de vista como persona con Síndrome de Asperger. No olvidemos que cada quien es diferente y único. Quizá nunca se llegue a comprender la totalidad de sensaciones y percepciones y allí es donde necesitamos mentes abiertas y una sociedad comprensiva con la diferencia.
